El tratamiento de adicción al Internet plantea uno de los casos más severos en cuanto a la forma en que la medicina debe hacer frente a un caso que resulta totalmente nuevo. Debido al desarrollo actual de la técnica, se han visto comportamientos compulsivos que muchas personas desarrollan frente al mundo virtual. Por otro lado, como pasa con casi cualquier adicción, hay factores puntuales que desencadenan el desarrollo malsano de ciertos hábitos. La cura debe ser un proceso totalmente integral.

Lo primero que por lo general se hace para tratar la adicción al Internet es hacer un diagnóstico evaluativo de personalidad. Se trata de establecer patrones de comportamiento que pueden hacer que una persona desarrolle una compulsividad de uso hacia el ciberespacio. Retraimiento, insatisfacción personal constante, tendencia a las ensoñaciones, pereza, estados depresivos recurrentes entre otros, están catalogados como procesos psicológicos que en teoría desencadenarían este problema. Esta es la parte más complicada del proceso, porque sin duda es ecléctica.

Significa que las variaciones entre un individuo al otro pueden ser tan grandes que obligue a que el establecimiento de una terapia sea un caso muy complicado. Por eso, es necesario que después de haber identificado con el mayor éxito posible las causas de la adicción al Internet, se pueda hacer un paralelo responsable entre los diversos entornos en que se mueven las personas. La adicción al Internet no suele ser un caso general, porque las reacciones pueden ser distintas.

Y no sólo en cuanto a la manera de ser de una persona, sino también debido a su estrato socioeconómico. Internet puede ser considerado una vía de escape, un sustituto de la realidad.  Quienes cuentan con mayores recursos para tener otras aficiones o tienen una cultura general más desarrollada, pueden ser menos proclives a la adicción al Internet que una persona de escasos recursos que no tenga una variedad de gustos intelectuales o la posibilidad de usar artículos suntuosos fácilmente.

El proceso de identificación de causas conlleva obviamente al proceso terapéutico. En este caso, se pueden hacer procesos de sustitución como mayor interactividad social, propuesta de otros pasatiempos, etc., dependiendo del caso particular. Alejarse del computador por ciertos períodos de tiempo es también otra alternativa. Algunas personas quienes enfrentan este proceso pueden desarrollar síndrome de abstinencia, tal y como sucede en muchos casos de drogadicción y alcoholismo. La adicción al Internet no es un caso menor y debe ser investigado.

 



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