Cuando decidimos finalmente que es hora de hacer trabajar nuestro cuerpo dándonos cuenta de que nunca lo ejercitamos, muchas veces no sabemos por dónde empezar y las primeras malas experiencias hacen que lo que habíamos imaginado muchas veces no sale como queremos, y todo lo que creíamos que íbamos a lograr en corto tiempo, nos complica mucho más las cosas, para que el comienzo de una rutina de ejercicios no se convierta en una mala experiencia, aquí un par de consejos para comenzar a ejercitar el cuerpo con todo lo necesario para hacer de nuestra vida mucho más saludable.

Primero y principal es la vestimenta. Usar ropa holgada y calzado cómodo como apoyo. Antes del ejercicio, sentar una rutina de calentamiento  de aproximadamente entre 5 a 10 minutos para aumentar lentamente la frecuencia cardiaca y calentar los músculos. Un calentamiento puede incluir desde caminar despacio, marchar en el lugar y otros ejercicios de bajo impacto como lo pueden ser abdominales o andar en bicicleta. Una vez finalizada toda la rutina de ejercicios repetir este tipo de actividades físicas para volver a estirar y reducir la frecuencia cardiaca y la respiración.

Expertos de la American Heart  Association sugiere que el ejercicio debe llevar un ritmo moderado durante un mínimo de 150 minutos por semana o 30 minutos al día, cinco días a la semana. A partir de ejercicios cardiovasculares,  se pueden incluir desde caminar, nadar, uso de bicicleta, bailar o trotar ligeramente.  Rompiendo la rutina con intervalos de 10 a 15 minutos ofrece los mismos beneficios y ayuda a los principiantes a construir una resistencia adecuada. Para mayor resultados, Aumente gradualmente la duración mientras se adapta a su nueva rutina.

El entrenamiento de fuerza ayuda a fortalecer los huesos, desarrolla los músculos y aumenta la quema de calorías. Evitar el entrenamiento con pesas en el mismo grupo muscular dos días seguidos. Los músculos necesitan tiempo para repararse después del entrenamiento de fuerza. Se recomienda con una rutina de estiramiento durante la primera semana de ejercicio, progresando a ejercicios de calistenia y entrenamiento con pesas ligeras durante dos semanas.

El ejercicio no debe doler. El dolor leve después del entrenamiento del peso puede ocurrir, pero si el ejercicio le produce dolor agudo o continuo debe de ser suspendido y el médico debe de ser consultado. Además no comenzar solo una rutina, ya que una mala posición en los ejercicios aumenta el riesgo de dolores no deseados. Consulte siempre a los expertos dentro del gimnasio.

 

Foto: www.rutinasentrenamiento.com



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